En este modelo experimental visto en la Galería Nacional de Victoria en Melbourne, Australia; el público, mirando un espejo, es capaz de realizar un análisis facial computarizado.
Posteriormente una máscara con idóneas proporciones faciales es aplicada sobre sus rostros y el software hace una representación de la cara de la persona con rasgos para lograr la cara perfecta. Aviso: ¡está lejos de ser perfecta!